Un poco asquerosos, sí. Pero como dicen cumplir con lo que prometen, muchos los prueban. ¿Te animarías?
Pene de tigre
Dice la medicina china que el miembro de este animal aumenta la resistencia masculina. Y no es el único falo afrodisíaco: chinos, japoneses y coreanos preparan un vino de arroz y pene de venado, con los mismos fines.
Hormigas cortadoras de hojasConsideradas un afrodisíaco desde el mediados del Siglo XV, en algunos lugares del mundo se regalan a los recién casados para inspirar una noche de bodas memorable.
Té MalunggayMuy popular en Filipinas, esta bebida se utiliza, primero, contra el envejecimiento. Pero quien los probaron aseguran que tiene, además, un efecto similar al Viagra.
Sangre de cobraPor más de 2000 años, la tradición cantonesa ha sostenido que matar a un cobra y beber su sangre es la receta de los hombres para tener potencia sexual. El tónico todavía se puede probar en Vietman y en China.
Jugo de escarabajo
Las secreciones de estos bichos parecen ayudar a subir la temperatura desde los tiempos de Julio César. Versiones un poco más livianas todavía se consiguen en Europa por 3 dólares la botella.
Dice la medicina china que el miembro de este animal aumenta la resistencia masculina. Y no es el único falo afrodisíaco: chinos, japoneses y coreanos preparan un vino de arroz y pene de venado, con los mismos fines.
Hormigas cortadoras de hojasConsideradas un afrodisíaco desde el mediados del Siglo XV, en algunos lugares del mundo se regalan a los recién casados para inspirar una noche de bodas memorable.
Té MalunggayMuy popular en Filipinas, esta bebida se utiliza, primero, contra el envejecimiento. Pero quien los probaron aseguran que tiene, además, un efecto similar al Viagra.
Sangre de cobraPor más de 2000 años, la tradición cantonesa ha sostenido que matar a un cobra y beber su sangre es la receta de los hombres para tener potencia sexual. El tónico todavía se puede probar en Vietman y en China.
Jugo de escarabajo
Las secreciones de estos bichos parecen ayudar a subir la temperatura desde los tiempos de Julio César. Versiones un poco más livianas todavía se consiguen en Europa por 3 dólares la botella.
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